Está visto que el frío no quiere darnos tregua éste año. El fin de semana hemos tenido sol, lluvia, aire... Menos mal que lo he aprovechado y he disfrutado mucho. Además en el sentido más amplio de la palabra.
Poco a poco todo está volviendo a la normalidad. Aunque no puedo evitar echar de menos mis mañanas en el Shambala; y otro tipo de mañanas. Mi hijo también está acusando éste cambio de horario; pero trato de compensarle cuando llego a casa. No dejo de admirar, día a día, su entereza.
Besos a tod@s.
No hay comentarios:
Publicar un comentario