miércoles, 7 de marzo de 2012

Promesas

Había prometido a su hijo que vendría ésta tarde. Pero no lo ha hecho. En su lugar, y sabíendo que no puede, ha enviado al abuelo. Mi hijo está en su habitación haciendo la ficha del colegio. Mientras, con una paciencia infinita, intento que se le pase el enfado con el que viene.
"Caminaba sola por la calle. Iba sumida en sus pensamientos y no reparó que había comenzado a llover. No sabía que hacer, que decisión tomar. La respuesta la conocía.
Ninguno de los dos era capaz de romper aquel cordón que les había unido.¿Podrían vivir sólo con lo que tenían? Puede que fuese demasiado pronto para saberlo.
Soñaba con un final feliz. De esos de película con los que tanto se había emocionado. Los guionistas decían que se inspiraban en la vida real. Aunque si lo hubieran hecho con la suya, habría sido una película de terror más que romántica..."
Besos.

2 comentarios:

  1. Bueno, ya me he leído un par de entradas y estoy llorando como una magdalena...Pero desahogarse es bueno. Ya te sigo. ¡Animo!

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias por seguirme! Espero que además de llorar te pueda ofrecer algún momento de risa.
    Besos.

    ResponderEliminar